Página principal

Inicio   Ayúdale a Caminar    Ciudad de la Música    Colabora    Agrupaciones Musicales    Contactar        Facebook


Arvo Pärt
Obras musicales del compositor: Arvo Pärt (7)
Clasificador Nº de obras
Ver todas
Música Actual
 • Conciertos1
 • Dúos1
 • Música Religiosa2
 • Pasiones1
 • Sinfonías1
 • Te Deum1

La educación musical de Pärt comenzó a los siete años de edad. A los catorce o quince años escribió sus primeras composiciones. Mientras estudiaba composición (con el maestro Heino Eller) en el conservatorio de Tallinn se decía de él que «parecía que cuando se sacudía las mangas se le caían las notas. Durante ese periodo tuvo muy pocas influencias externas de la Unión Soviética, exceptuando algunas grabaciones y partituras ilegales.

Aunque en el momento de su nacimiento Estonia era un estado independiente, la URSS ocupó el país en 1940 como resultado del pacto Mólotov-Ribbentrop (entre la Unión Soviética y el Tercer Reich) y el país permaneció bajo el control de la Unión Soviética (excepto un período de tres años bajo ocupación alemana) durante 51 años.

La obra de Pärt generalmente se divide en dos periodos. Sus primeros trabajos partieron de un neoclasicismo bastante severo (influido por Shostakóvich, Serguéi Prokófiev y Bela Bártok). Luego empezó a componer usando el dodecafonismo y el serialismo de Arnold Schoenberg. Sin embargo, esto no sólo atrajo la ira de los burócratas culturales soviéticos, sino también demostró ser un callejón creativo sin salida[cita requerida].

El compositor Paul Hillier dice acerca de este periodo: «Llegó a un punto de completa desesperación en el cual la composición de música le parecía el más inútil de los gestos, y le faltaba la fe musical y la fuerza de voluntad para escribir una sola nota».

Esto debe de ser una exageración, ya que durante esa época compuso su Tercera Sinfonía (de 1971, de estilo transicional). Sin embargo es claro que Pärt experimentó una profunda crisis personal. Su respuesta fue sumergirse en la música antigua, es decir, volver a las raíces de la música occidental. Estudió canto llano, canto gregoriano y las primeras apariciones de la polifonía en el Renacimiento. Al mismo tiempo comenzó a explorar la religión y se unió a la rígida Iglesia ortodoxa rusa, indicando que quizá su crisis no era exclusivamente musical, sino también espiritual.

La música que produjo en esta época fue radicalmente diferente. Pärt la describe como “tintineante” (tintinnabular) como el tañir de campanas. La música se caracterizaba por armonías simples, frecuentemente notas sueltas sin adornos, o acordes triádicos (los cuales formaron la base de la armonía occidental). Hay alguna reminiscencia al sonido de las campanas (de allí el nombre). Los tintinábulos son rítmicamente simples y no cambian el tempo. Es clara la influencia de la música antigua en estas obras.

Otra característica de las últimas obras de Pärt es que tienen textos sagrados (aunque la mayoría de las veces elegía el latín o la lengua eclesiástica eslava que se usa en la liturgia de la iglesia ortodoxa en vez de su lengua materna (el idioma estonio).

Pärt es más conocido por sus últimas obras, y es un caso infrecuente de compositor moderno que alcanza la popularidad en vida.

La música de Arvo Pärt ha atraído a la atención pública en Occidente, particularmente gracias a Manfred Eicher, que a partir de 1984 grabó varias de sus composiciones para la firma ECM Records, además de influir en la nueva generación de compositores estonios como Erkki-Sven Tüür y Lepo Sumera.

Pärt ha dicho que su música es similar a la luz que pasa a través de un prisma (óptica): la música puede tener un significado ligeramente diferente en cada oyente, creando un espectro de experiencias musicales, similar al arco iris.

El compositor minimalista Steve Reich comentó acerca de Pärt: «Ya desde que estaba en Estonia, Arvo estaba sintiendo lo mismo que el resto de nosotros. [...] Amo su música y amo el hecho de que sea un hombre tan talentoso y valiente. [...] Está completamente fuera de la corriente dominante y sin embargo es enormemente popular, lo cual es muy inspirador. Su música llena una profunda necesidad humana que no tiene nada que ver con la moda».

Su música se ha usado en más de cincuenta filmes, como Väike motoroller (1962) y Promised Land (‘Tierra prometida, 2004). El Cantus in Memory of Benjamin Britten fue usado en Les Amants du Pont-Neuf (de Léos Carax, 1991), en Fahrenheit 9/11 cuando mostraba el final de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York y en la película Japón del cineasta mexicano Carlos Reygadas. Spiegel im Spiegel fue usado en Wit (de Mike Nichols, 2001), en "Swept Away" de Guy Ritchie protagonizada por Madonna (2002), en el drama Gerry (de Gus van Sant, 2003), Soldados de Salamina (de David Trueba, 2002) y en Elegy (de Isabel Coixet, 2008).

* Información obtenida de Wikipedia.

Ayúdale a Caminar     Ciudad de la Pintura    Contactar


© copyright 2016 "Ciudad de la Música" | Todos los derechos reservados